Las características rocas del rodeno modeladas a lo largo de 250 millones de años y las pinturas rupestres que dejaron las comunidades de cazadores-recolectores hace 6.000 años en los abrigos de la Sierra de Albarracín configuran uno de los parajes más bellos e impresionantes de la provincia de Teruel, hoy  englobado en el Parque Cultural de Albarracín.

La propia Comarca Sierra de Albarracín planteó en diciembre de 2015 la primera edición de unas becas para la instalación de obras artísticas integradas en el paisaje natural  del sendero del Barranco de las Tajadas.

Los ganadores de dichas becas que presentaron sus proyectos fueron cuatro artistas del grado de Bellas Artes de Teruel, Hugo Casanova, Silvia Gil, Ruth Diago y Alba Lorente que realizaron sus obras durante el mes de febrero de 2016.

La obra “Ciervos”  es un homenaje a los primeros artistas que poblaron la zona con la recreación escultórica de algunas de sus pinturas rupestres. La artista procedente de Castellon Ruth Diago Alcolado  ha escogido tres de las figuras más características de la zona, ciervos, y las ha reconstruido en tres dimensiones con siluetas de madera atornillada. Localizamos esta instalación encima de unas rocas junto a la senda que conduce por distintas manifestaciones pictóricas rupestres de la zona.

"En un primer momento iban a ser realizadas mediante varillas de hierro soldadas", explica la escultora, "pero al final se decantó por trabajarlas con piezas de madera de diferentes tamaños. Es mucho más natural". El objetivo de su intervención fue "modelar la naturaleza del entorno e introducir nuevos elementos que se relacionan con su naturaleza", y también "conquistar la atención de los niños visitantes".

-ARTIGAS GRACIA, Miguel Angel: “Bezart; o embellecer lo inmensamente bello" Diario de Teruel 29 de diciembre de 2015

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